El mercado del litio ha explotado desde 2016, creciendo más de un 2.000%. En 2014, una celda de batería costaba unos 290 dólares, pero hoy, en 2024, solo cuesta 78 dólares. ¡Una diferencia enorme!
Las baterías de litio son súper importantes porque se usan en los teléfonos, portátiles y coches eléctricos. La producción de litio se ha cuadruplicado desde 2010 porque todo el mundo quiere más y más dispositivos que lo usan. Pero el problema es que solo unos pocos países controlan la mayoría del litio, como Australia, Chile y China.
Extraer litio no es tan fácil ni amigable con el planeta. Requiere mucha agua y energía, y cuando ya no se usan las baterías, reciclarlas es complicado. Además, el litio tarda cientos de miles de años en descomponerse.
¿Por qué bajan los precios si hay tanta demanda?
Aunque parece raro, lo que ha pasado es que se ha producido tanto litio que el precio ha bajado un montón, un 73% desde 2014. Antes pensábamos que, como todos querían baterías, el precio del litio seguiría subiendo, pero ahora todo ha cambiado.
Por ejemplo, en 2014, una celda de batería costaba 290 dólares, y ahora solo 78 dólares. Eso es genial para nosotros como consumidores porque podría hacer que los precios de teléfonos y coches eléctricos bajen también. Aunque, no sabemos si las empresas van a hacer que los productos sean más baratos.
Y aquí está lo interesante: aunque el litio es clave ahora, ya hay nuevas tecnologías que podrían reemplazarlo, como las baterías de estado sólido o las de sodio. Así que en los próximos años, podríamos ver cómo el litio va perdiendo importancia.
